En Rascafría, las más famosas: Las Presillas y La Isla. Las Presillas están en pleno Valle del Paular, agua cristalina y muy fría, no te quejes si lo que quieres es sofocar el calor del asfalto, a orillas del río Lozoya. La Isla, por su parte, está situada en la Sierra Norte de Madrid, un paraje algo más tranquilo y menos transitado.
Buitrago de Lozoya acoge otras de las piscinas naturales más famosas de la comunidad: Las piscinas de Riosequillo. Son las más visitadas por ser las mejor preparadas para los bañistas, con 4.500 metros cuadrados para chapotear y aforo de 2 mil personas.
Si te acercas hasta Cercedilla podrás disfrutar de Las Pozas de La Dehesa, con espectaculares vistas a la Sierra de Guadarrama y junto a los restos de una antigua calzada romana. Agua muy fresca y rutas para los amantes del senderismo. Lo tiene todo.
En San Martín de Valdeiglesias más que unas piscinas encontrarás el único embalse apto para el baño de la Comunidad de Madrid: el pantano de San Juan. También podrás realizar actividades acuáticas a motor y otros deportes naúticos en las estribaciones de la Sierra de Gredos.
En pleno Parque Natural de La Pedriza, en la Sierra de Guadarrama, el río Manzanares forma una piscina natural conocida como La Charca Verde. Para llegar tendrás que caminar media hora aproximadamente, pero la tranquilidad y el paisaje que vas a observar van a hacer que el tiempo se pase volando.
Fuente: Blog Toprural
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